Bogotá, D.C., Mayo 10 de 2020

Cada año en mayo se celebra un día especial “el día de las madres”, regalos, llamadas, promesas y confesiones durante este día, ¿alguien piensa en el papel fundamental que juegan en sus vidas su mamá? ¿los sacrificios que hacen?, ¿los secretos que guardan?

Hoy quiero compartirles una verdadera historia para que reflexionemos, si como hijos valoramos lo que cada una de nuestras madres ha tenido que vivir para que seamos felices.

Las mujeres de mi generación y anteriores a la mía, fuimos educadas con el concepto de que el matrimonio era para toda la vida y lo socialmente correcto era casarse y tener hijos, ser una buena esposa y mantener el buen nombre e imagen de su familia; aquella que se atrevía a salirse de esos parámetros y no permitir el maltrato de su esposo, era tildada y perseguida dentro de una sociedad machista y autoritaria.

Una amiga mía se caso muy joven a los 18 años, con su único novio que tenia un proyecto de vida interesante, pero año tras año se despejaba un hombre distante que solo le importaba sobresalir en su trabajo y dejaba de lado su familia; ella lo entendía como la disciplina que él se había impuesto para lograr su meta.

Mientras tanto ella cumplió su parte, apoyarlo en todo; ella tuvo que vivir en diferentes ciudades sola con sus hijos, como podía trabajaba para ayudar económicamente el sostenimiento del hogar; lo que ella no se imaginaba era la doble vida que llevaba su esposo durante los largos viajes que hacia de trabajo.

En esos desordenes del esposo, ella entra grave a la clínica por una infección que le hizo tener una cirugía de urgencia y perder la mitad de su sistema reproductivo, lo cual mas tarde desencadeno en papiloma humano comúnmente conocido como cáncer en el cuello del útero, provocándole tantas tensiones que la llevaron a desarrollar una arritmia cardiaca por vivir todas estas situaciones en silencio.

Su organismo le paso la cuenta de cobro y entro en una sepsis que la lleva a la unidad de cuidados intensivos donde duro 8 días; luego de un mes de hospitalización le dan la salida de la clínica y su esposo le envía el conductor para que la lleve a casa, mientras él se encontraba haciendo el trasteo de su nueva amante, la esposa de su jefe.

Al enterarse mi amiga decidió que no le importaría correr el riesgo, pero que esa situación ya pasaba del irrespeto y no continuaría una relación con un hombre que no era lo que aparentaba ante todos, que ya no podía seguir guardando la imagen a un hombre que era el chisme de los pasillos de las oficinas donde trabajaba.

Decidió separarse y empezar una nueva vida, de allí comenzó una guerra en donde él buscaba desprestigiarla y pisotearla usando el poder que había alcanzado y ella la manera de no naufragar en su intento.

Por mas de 10 años ella ha luchado por mantenerse a flote, logrando posicionarse en su entorno laboral y personal, defendiéndose de todos los ataques continuos de este personaje, logrando para sus hijos una vida diferente, dándoles lo mejor que pudo ofrecerles; aunque no con los lujos que ostenta su padre al lograr su meta laboral, pero si dándoles con sacrificio y amor todas las cosas que ha podido.

Hoy sus hijos no conocen la verdad de todo lo que ella tuvo que vivir y sabe que lo material que les pueden ofrecer estos padres maltratadores a sus hijos jamás se comparara con el sacrificio de vida de una madre valiente y guerrera. Que los hijos se llevan tatuados en el alma y que el dolor y el sacrificio de una madre por sacarlos adelante jamás espera ser reconocido, solo la satisfacción en el corazón de haber hecho las cosas bien, solo por sus hijos.

Hoy les cuento esta historia, para que reflexionemos lo que de verdad una madre es capaz de hacer por sus hijos y nosotros como hijos ¿valoramos cada uno de los sacrificios que hacen por nosotros nuestras madres?

Es un día no solo para agradecer sino para buscar en nuestro corazón si de verdad entendemos y valoramos lo que las mamás hacen por cada uno de nosotros; las mamás somos trabajadoras, educadoras, guerreras, tenemos que estar presentes en tantos espacios que a veces me admiro de pensar lo que somos capaces de hacer; lo que si es cierto que por nuestros hijos somos capaces de todo y más.

Hoy me felicito y me siento satisfecha, por que al igual que mi amiga me siento tranquila de que todo lo que les he dado a mis hijos es el camino para que valoren y entiendan lo que en realidad en la vida es importante. Es tiempo de entender la importancia de la mujer y trabajar entre todos por que cada vez seamos más mujeres con verdaderas oportunidades de vida, que nos haga ser plenas, destacadas y diferentes.

 Y a todas ustedes madres de hijos, de ideas, de momentos; crear un camino para alguien es hermoso, pero lo mejor es sentir cuando lo valoran de corazón.

@MarialeTrujillo