Durante el desarrollo profesional como gerente de lo político,  he realizado campañas desde el método de empresas electorales analizando en ellas sobre todo el comportamiento de las personas que rodean al candidato durante la campaña, creando  equipos sólidos y comprometidos; pero principalmente el comportamiento del candidato que al final de todo es el que debe responder a la implementación de las acciones que indica la estrategia para hacer exitosa su campaña.

Lo primero que hay que entender es como piensa el candidato, sus anhelos y sus sueños; ya que siempre estará rodeado de influencias externas que trataran de hacerlo modificar sus objetivos y darle vuelta a sus paradigmas; pero ¿Qué tanto predomina lo que su mente construye como decisiones que no son propias sino colectivas, para que las pueda liderar?, ha sido mi cuestionamiento.

Para la construcción de las empresas políticas el desarrollo multidisciplinario de la ciencia les permite avanzar de manera efectiva, es por esto que la investigación de percepciones nos genera un campo de acción mucho más amplio, y si conocemos como reaccionan las mentes de los políticos desde los constructos que poseen, tendremos una variable adicional en la implementación de futuras campañas, lo cual superara las expectativas de efectividad que se han tenido en la industria de la política.

La ciencia ha evolucionado para darnos herramientas necesarias entendiendo la mente humana,  fisiológicamente somos diferentes entre hombre y mujer, por lo tanto  el comportamiento depende de esas diferencias que aún no tenemos claras. Tres ciencias que entran a jugar la neurociencia, la psicología y la sociología que nos incluye en el mundo de la mente sobre el entendimiento de las personas que agrupan conexiones mentales que componen su percepción, la cual se transforma en decisiones.

Para el Dr. Restrepo en su libro “Pacto entre géneros” las emociones jugaban un papel importante entre las diferencias que existían en la mente de cada uno. Por eso en su último libro habla sobre el derecho a la ternura, planteando que los hombres no están ni cultural ni fisio-sociológicamente preparados para manifestar sus emociones, de la misma manera como lo hacen las mujeres. (Restrepo, 2003, pág. 19)

En el 2014 conocí a un neurofisiologo, científico mexicano que demostraba la diferencias entre los cerebros de hombres y mujeres, para el Dr. Eduardo Calixto en su investigación post doctorado de la universidad de Pittsburg – Alemania, la conceptualización de la realidad entre géneros es diferente. “Tenemos diferencias fundamentales que inciden en la forma como nos comportamos y conductualmente desarrollamos una relación interpersonal. (calixto, 2014)

     En resumen, las evidencias genéticas ya argumentan la diferencia entre el cerebro de un hombre y una mujer, los procesos entre ellos debido a su anatomía y neuroquímica son distintos, la anatomía del cerebro cuenta con el sistema límbico, la corteza prefrontal y el hipocampo que poseen respuestas distintas de acuerdo al género; el cerebro cuenta con la amígdala cerebral que genera emociones, la corteza prefrontal que genera reflexión y análisis y el hipocampo donde esta la memoria, la atención y el aprendizaje. La neuroquímica esta relacionada en la comunicación, neurotransmisores y las hormonas que amplifican el aprendizaje en la memoria.

El cerebro de los hombres no trabaja tan rápido como el de las mujeres (siempre lo he dicho), científicos de la Universidad de Pensilvania scanearon los cerebros de 949 hombres y mujeres, con edades entre 8 y 22 años, y encontraron algunas diferencias sorprendentes que argumenta que el cerebro del hombre cuenta con conexiones internas dentro de cada uno de sus hemisferios, principalmente el izquierdo; y las mujeres una mayor interconexión entre los dos hemisferios.

Si entendemos al ser humano desde su esencia, se podrá inferir que el comportamiento de nuestros lideres y políticos tiene una raíz, cada uno expresa y maneja de forma distinta sus propios procesos; pues ahora entendamos como culturalmente todo lo que tenemos en nuestro cerebro modifica las acciones de nuestra mente.

En definitiva, el mundo de los constructos es mundo apasionante por que permite entender muchas cosas que antes nos era desconocido, interpretar emociones, afectos o sentimientos, por decir manifestamos sentimientos como la culpa que se basa en la idea de quien eres y como debes comportarte de acuerdo a las creencias, la cultura y la educación que se recibió; pero la pregunta es, ¿para todo el mundo el sentimiento de culpa es el mismo?

La política es el arte de servir y de allí radica la esencia misma de porque se deben generar mejores prácticas y más conciencia de cómo se debe pensar y actuar en lo público, en el servicio a la gente; un verdadero líder cuando esta inmerso en la política, merece tener la oportunidad de ser escuchado pero también escuchar la realidad desde los verdaderos actores,  sobre todo de construir de la mano de la gente las soluciones a necesidades reales, jamás quedandose en un pasado que solo sirve como lecciones aprendidas o como parte de los libros de historia.

Hoy en pleno siglo XXI, pasando en medio de la pandemia de COVID-19, las actuaciones políticas y sociales deben cambiar, buscando la verdadera esencia de la política “Servir”; hoy la falencia de liderazgos nos esta llevando al abismo de las irresponsabilidades políticas, las decisiones y planeamientos se han tomado de forma rápida sin entender lo que de verdad es importante y urgente, no para el bien común, en manos de cada uno de nosotros está la realidad que construimos, es momento de despertar, de generar nuevos procesos, de entender a la gente  de comunicarle a hombres  y mujeres para hacerlos participes de la gobernanza que requieren los Estados; hombres y mujeres trabajando por una misma causa, llegándoles al corazón a través de su mente, es el desafío que tenemos los que estamos inmersos en la política.